Cabreo monumental del Barça con Nico Williams y su entorno

El Barça alucinó con el anuncio de la renovación de Nico Williams por el Athletic en un golpe que no esperaban ya que había la certeza de que la próxima semana podrían cerrar la operación si el futbolista aceptaba el pago de la cláusula de rescisión. La operativa estaba preparada y el club se enteró de la decisión del futbolista por la oficialidad de su renovación a pesar de que en las últimas horas ya se olían algo. El cabreo del club blaugrana con el jugador y su entorno es monumental porque creen que les ha utilizado y que no ha ido de cara en las últimas horas para dejarles en la estacada tras unos 15 días de intensas negociaciones.

Nico Williams anuncia su renovación por el Athletic

El sentimiento en el Barça era de incredulidad, como el año pasado cuando Nico Williams se vistió con la nueva camiseta del Athletic al mismo tiempo que mantenía alguna videoconferencia asegurando que estaba interesado en firmar como blaugrana. Finalmente decidió quedarse dejando en la estacada al Barça, pero este año las negociaciones estaban mucho más avanzadas ya que había acuerdo total en un montante salarial hasta el 2031 y muy avanzadas las gestiones para poder pagar la cláusula de rescisión la próxima semana.

En el Barça creen que el entorno de Nico Williams no ha jugado limpio y que ha utilizado la propuesta del club blaugrana para firmar la renovación de su vida en el Athletic con una importante subida salarial. El hecho de no avisar ni siquiera de su decisión final es una última treta que ha dejado en fuera de juego al Barça y ha provocado estupor y enfado tras los contínuos contactos de los últimos días.

La operación comenzó a complicarse al desvelarse por 'SPORT' la reunión en Barcelona el pasado 13 de junio del agente del futbolista, Félix Tainta, con el director deportivo del club blaugrana, Deco. En aquella reunión, el representante comunicó la disponibilidad de Nico Williams para avanzar en su fichaje y el compromiso de que quería vestir de blaugrana tras el fiasco del año anterior. Al hacerse público el encuentro, el Athletic activó sus presiones sobre el futbolista y su entorno complicado muchísimo la decisión final del futbolista. Incluso, el club vasco elevó una queja a LaLiga y pidió fiscalizar las cuentas del Barça.

La postura de Nico Williams parecía tan firme, que en el Barça creció el optimismo. Y más cuando los números de contrato fueron aceptados por Nico y su entorno. Se daba ya por hecho...pero comenzaron los problemas. El entorno de Nico que, incluso, deslizó que podía haber alguna facilidad de pago en la cláusula, exigió de buenas a primeras garantías muy duras sobre la inscripción del jugador. Y, luego, sí se abrió a reformular el acuerdo con vías de escape asumibles para el Barça como un traspaso o una cesión durante el mes de agosto si la inscripción se complicaba. Felix Tainta llamó al Barça media hora antes del anuncio oficial para aclarar que si no aceptaban una cláusula de liberación dura, la operación se rompía, pero no avisó del anuncio de la renovación. Y luego llegó la bomba.

Todos estos avances dejaban claro al Barça que este verano sí sería posible el fichaje, pero la respuesta final de Nico se hacía esperar. Y se aplazó el pago de la cláusula hasta la próxima semana para dar más aire al representante y al futbolista. Todo esto hasta el anuncio de la renovación del futbolista hasta el 2035, algo que ha dejado perplejos a los dirigentes del club blaugrana. Indignación es poco, pero ya trabajan para seguir reforzando en la plantilla.